Tras quebrar el vidrio de un vehículo al momento en que jugaba con sus amigos, un niño se hizo responsable y dejó una nota de disculpa con el número de teléfono de sus padres, a fin de pagar la compostura que causó.
“He roto sin querer su cristal. Soy Alejandro. Disculpe”, escribió el pequeño en una hoja de papel.
Dijo que luego del accidente, decidió informarle a su madre de lo ocurrido, la mujer le sugirió que escribiera todos los datos necesarios en un papel y lo dejara en el carro, para que así pudieron comunicarse con ellos a la brevedad posible.
Este hecho que se volvió viral en redes sociales, se registró en Palomares del Río en Sevilla, España.
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