Rusia ha desarrollado el primer dron kamikaze, un sistema de “colocación de minas en el aire” del mundo, que fue diseñado para destruir vehículos aéreos no tripulados y en tierra, mediante municiones que merodean por el campo de batalla y atacan objetivos, según Alexánder Zajárov, diseñador jefe del grupo de empresas ZALA AERO(subsidiaria de Kaláshnikov).
El nuevo sistema gira en torno a la munición llamada Lancet, un dron kamikaze desarrollado por ZALA AERO. “Se pueden enviar estas municiones al cielo y organizar una colocación de minas en el aire durante varias docenas de horas”, explicó Zajárov.
Los drones de combate de un enemigo potencial tienen velocidades de unos 150 kilómetros por hora, y Lancet es capaz de golpearlos en caída libre, “Nosotros, con nuestros 300 kilómetros por hora en picada, lo haremos fácilmente”.