Redacción
Culiacán, Sinaloa .- Ante la contingencia por COVID-19 todo el personal de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa trabaja con base y estricto apego a los procedimientos sanitarios, especialmente las áreas de la Dirección de Servicios Periciales y el Servicio Médico Forense, que incidentalmente podrían tener contacto con personas víctimas de un delito portadoras del virus.
El director de la Unidad de Medicina Forense regional zona centro del Servicio Médico Forense, Martín Borboa González, señaló que aunque la institución no tiene una participación directa en la atención de la contingencia, el personal de campo sí está expuesto a posible contacto con una víctima de delito, y que sin tener un diagnóstico con anterioridad sea portadora del virus.
Aclaró que, si bien la contingencia actual es reciente, el Servicio Médico Forense debe estar preparado para el manejo de cadáveres de personas con enfermedades infectocontagiosas diversas al COVID-19, como hepatitis, SIDA, entre otros, lo que motiva que se cuente con el equipo de bioseguridad necesario.
Añadió que están obligados a utilizar de manera eficiente todo el equipo con el que se cuenta, que es presupuestado y adquirido con suficiencia para cubrir lo que se requiere para operar todo el año.
“Se llegará a tener contacto con algún paciente de COVID, vamos a decir una persona que ni siquiera supiera que estaba enferma y que por alguna situación llegue a ser balaceado accidental o intencionalmente y fallezca y que nosotros actuemos por esa situación del homicidio y que esta persona pudiera ser portador del virus…
… realmente el señor fiscal ha manejado muy buena disponibilidad con nosotros, se nos acaba el material e inmediatamente nos surte, no hemos tenido ese problema, pero particularmente ahorita por el problema de la contingencia de salud, más allá de eso, estamos más encima de los muchachos en que porten los equipos necesarios, que sí contamos con ellos”.
Ireya Alicia Paredes Leyva, titular de la Dirección General de Servicios Periciales, señaló que todas las áreas de trabajo cuentan con los materiales necesarios para mantener las medidas de bioseguridad, tanto en las instalaciones como en el trabajo de campo.
Con relación al equipamiento de operaciones se cuenta con materiales para cubrir todo el año, ya que del fondo federal se proyectan y se cubren todas las necesidades de trajes especiales, botas, cubrebocas, caretas, lentes, químicos y reactivos.
“Si nos falta algo extra entonces la compramos a través del estado, no tenemos que estar pidiendo porque aquí tenemos las cosas, el N95(mascarillas) nosotros ese sí normalmente pedimos menor cantidad porque la demanda de acuerdo a las necesidades no es tan alta, y aquí sí tuvimos que darles a todos los criminalistas, a los médicos y a los químicos, que son los que salen a tomar muestras o que salen a atención, ese lo tuvimos que conseguir en una cantidad más elevada de los normal, fue la única compra que tuvimos que hacer extra, aparte de los líquidos desinfectantes y del gel”, destacó.