Redacción
Culiacán, Sinaloa.- Ya es común que los padres de familia permitan que sus hijos se bañen bajo la lluvia o jueguen con el agua de los arroyos y charcos, sin embargo, se debe pensar dos veces antes de otorgar este permiso ya que no solo se pueden producir accidentes sino que es un riesgo para la salud.
En la cuestión de la piel, el director del Centro Dermatológico de Sinaloa, Guillermo Moraila Moya manifestó que esta actividad puede generar bacterias e infecciones debido a la suciedad del agua que trae desechos, restos de basura e incluso heces de animales.
“Esto va a provocar que una piel que no está intacta, que una piel que está lastimada, que tiene heridas pueda infectarse y lo más probable es que agarre estreptococo y estafilococo, es decir, bacterias que generalmente están en el medio o que pueden entrar por vía respiratoria y de ahí pasar a la piel”, dijo.
Señaló que debido a esto la piel se puede tornar ulcerosa, costrosa y con ardor que causan muchos problemas porque son contagiosas.
Por ello, recomendó evitar totalmente esta situación, pero en el caso de que la lluvia tome por sorpresa a las personas que están en la calle, lo mejor es que en cuanto lleguen a casa se quiten el calzado y la ropa, ventilarse y secar, para evitar que se desarrollen hongos al haber atravesado por charcos de agua.