Redacción
Culiacán, Sinaloa.- Debido a las fechas conmemorativas de diciembre y por los meses de confinamiento debido a la pandemia del COVID-19, la población puede haber ganado algunos kilos por el relajamiento de los hábitos de alimentación, por lo que una vez que los festejos han terminado es necesario regresar a las buenas prácticas, dado que los kilos se van acumulando en grasa y es mucho más difícil de bajar después, destacó Marcela de Jesús Vergara Jiménez.
La directora de la Facultad de Ciencias de la Nutrición y Gastronomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) manifestó que el aumento de kilos, los cuales van cuando menos de 3 por mes, se debe a que las personas deciden consumir alimentos sobre todo altos en azúcar, carbohidratos y grasas, pero algo muy importante, dejan de consumir agua y no hacen ejercicio.
“Todos los alimentos y todos los grupos de alimentos nos proporcionan diferentes nutrimentos que son importantes para que mi cuerpo funcione adecuadamente, por lo tanto, todos deben estar incluidos en balance, organizados en función de lo que yo necesito. También otro elemento que debemos visualizar es el consumo de azúcares refinados o los azúcares añadidos. Si usted ve en el supermercado un jugo que dice azúcar añadida, ese no es un producto que tenemos que recomendar, vamos a ir mejor a los jugos naturales o inclusive mejor la fruta completa con toda y su fibra para que podamos obtener los beneficios completos”, detalló.
La especialista en nutrición de la UAS mencionó que una vez que se termina el periodo de festividad y aun y cuando la mayoría de las personas permanecen en casa por la pandemia, es necesario hacer un alto y regresar a los buenos hábitos de alimentación en la idea de eliminar esos kilos ganados, por lo que exhortó a empezar a consumir mayor número de frutas, verduras y proteínas cocinadas preferentemente a la plancha, además de regresar a beber, al menos, dos litros de agua diariamente, disminuir el consumo de refrescos y de bebidas azucaradas, al mismo tiempo de realizar caminatas.
“Ya que nosotros sabemos que estos azúcares refinados, las grasas saturadas, las grasas trans, las grasas que están todas fritas y quemadas, provocan mucha inflamación en nuestras células, y esa inflamación puede de alguna manera desajustar la funcionalidad de nuestro sistema inmunológico o inclusive sumar, en el caso de que alguna persona haya sido contagiada con el virus, entonces sumar a todo este proceso inflamatorio y generar un cuadro más desafortunado para la persona”, indicó.
Vergara Jiménez expuso también que es muy importante controlar el consumo de alcohol, además que destacó que es prioritario el consumo de agua simple.
“Ahorita con las temperaturas que han bajado a la gente se le antoja muchísimo menos el agua, y la gente tiene una asociación entre tomar agua por sed, pero no, nosotros tenemos que tomar agua porque nos ayuda a transportar nuestros nutrimentos, a eliminar toxinas, a mantener nuestro cuerpo en óptimas condiciones, tenemos que tomar mínimamente dos litros de agua simple, porque mucha gente me pregunta que si toma agua de jamaica o de limón esa también cuenta, esos son líquidos que también cuentan, pero nosotros estamos hablando en este punto particular de agua simple, debemos tener mucho cuidado y por supuesto la práctica del ejercicio físico”, concluyó.