Apenas el pasado domingo, un adulto que jugaba fútbol en los campos del Muralla en Mazatlán, perdió la vida en pleno partido, y ayer la historia se repitió en el puerto, al desplomarse un menor de 14 años de edad en medio de la cancha de la Toledo Corro, al parecer por un infarto fulminante.
Los hechos aún no encienden los focos rojos de las autoridades porteñas, quienes al parecer o al menos no han hecho público la gravedad de los casos que han enlutado a familias mazatlecas.
Datos establecen que ayer, Agustín “N”, un adolescente vecino de la colonia Benito Juárez, y quien al parecer pertenecía a la Escuela de Toluca, se desplomó sobre el pasto, ante la mirada atónita de sus compañeros de juego.
Minutos después al sitio arribó personal de emergencias, quienes pudieron hacer poco por el deportista, debido a que al parecer perdió su último partido al ser fulminado por un inesperado infarto.
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