Los restos de al menos 215 niños fueron hallados enterrados en el sitio de un antiguo internado católico de Canadá, construido hace más de un siglo para integrar a los indígenas en la sociedad dominante, según una comunidad amerindia local.
Un experto descubrió los restos humanos el pasado fin de semana al utilizar un georradar en el lugar, que se ubica cerca de Kamloops, en la provincia occidental de Columbia Británica, según anunció la comunidad aborigen Tk’emlups te Secwepemc.
Según la especialista, las causas de muerte y fecha se ignoran, ya que no existen registros por parte de la dirección del internado, aunque su desaparición ya había sido mencionada en el pasado por miembros de esa comunidad, por lo que esperan en junio ya tengan resultados de la investigación.
El antiguo internado, gestionado por la Iglesia católica en nombre del gobierno canadiense, fue una de las 139 instituciones de este tipo creadas en el país a finales del siglo XIX, fue inaugurado en 1890 y llegó a tener 500 alumnos en la década de 1950. Cerró sus puertas en 1969.
Investigaciones establecen que en el sitio unos 150 mil niños amerindios, mestizos e inuit fueron reclutados a la fuerza al ser apartados de sus familias, su lengua y su cultura, muchos de ellos fueron sometidos a malos tratos o abusos sexuales, y al menos 3.200 murieron, en su mayoría de tuberculosis.