Culiacán, Sinaloa.- Por motivos desconocidos David intentaría saltar de un edificio en la colonia centro, sin embargo, algún ciudadano de Culiacán, por azares del destino lo vio cuando al filo de la azotea se encontraba dispuesto a arrojarse, y decidió que debía ayudarlo llamando al servicio de emergencias.
El reporte fue recibido por las corporaciones de auxilio y las de seguridad de Culiacán, gracias al despliegue que se mantiene en toda la ciudad, una patrulla de la Policía Municipal Unidad Preventiva que se encontraba cerca de la avenida Álvaro Obregón, entre Colón y Escobedo de la colonia Centro, acudió de inmediato al lugar, la adrenalina corría por las venas de los elementos, había que salvar una vida.
Lo vieron en lo alto del edificio, justamente en la cornisa con medio cuerpo hacia el vacío, al parecer decidido en arrojarse; ellos no podían permitirlo, había que ayudarlo; en segundos subieron a último piso en la azotea de más de 12 metros, de altura y lo localizaron sentado con una pierna al vacío y otra más aferrada a la estructura.
No se acerquen les decía, sin embargo, los elementos sabían que para impedir un desenlace fatal debían sujetarlo a como diera lugar.
El oficial a cargo, realizó una llamada a un superior, mientras le comentaba a este del caso se acercó a David, “Estoy aquí para ayudarte, por favor no te tires viejo” fueron las palabras del Policía Fernando Bueno y en cada una había una brisa de esperanza, si, estaban ahí para ayudarlo, él y dos policías más, a quienes también su familia espera en casa y que como algunas veces durante el servicio, la duda de regresar se hace presente, sin embargo el oficio no espera y el peligro es latente hay que tomar acción.
Fue ahí, después de un minuto y medio donde el Policía Municipal se sintió seguro de sujetarlo, el riesgo valía la pena, y en cuestión de segundos los tres elementos ya lo tenían a salvo.
Por la Avenida Álvaro Obregón, ya se encontraban Bomberos, elementos de Cruz Roja y otras corporaciones de seguridad, afortunadamente, David, fue rescatado, por héroes anónimos, que de nuevo, supieron hacerle honor a su misión, proteger a los ciudadanos de Culiacán.