Un Japón contundente en el arranque se presentó en la cancha del Estadio Saitama para imponer condiciones 2-1 ante un cuadro mexicano que en un principio no pudo contener a la joya japonesa Takefusa Kubo.
Tan sólo seis minutos del pitazo inicial el Tifón azul sacudió al tricolor, una jugada a profundidad por el costado derecho con Ritsu Duan terminó en el primer gol del juego tras un remate de primera de Kubo.
El VAR apareció al minuto 9, por segundo partido consecutivo César Montes decidió mal dentro del área y tras la revisión se decretó penal, mismo que hizo efectivo Duan para poner el 2-0 al minuto 11. En tan sólo cuatro minutos Japón desnudo las falencias del equipo de Jaime Lozano.
Con intensidad, presión alta y un juego muy vertical el conjunto japonés fue muy superior en todas las líneas. Nada la salió bien a México en unos primeros quince minutos de terror donde Japón aprovechó las dudas en la salida que tenía el rival y estuvo más cerca de concretar el tercer gol ante un tricolor que decidió siempre mal. La suerte no acompañó porque al final del primer tiempo Erick Aguirre en un esfuerzo defensivo se lesionó y tuvo que dejar el partido.
En el complemento los locales con el marcador a su favor bajaron las revoluciones. México vino a más con mayor control del ballm y el cuadro nipon se sintió más cómodo jugando al contragolpe. Y fue así como al minuto 68 Johan Vázquez tuvo que hacer uso de un último recurso al derribar a un rival que se enfilaba solo a portería de Guillermo Ochoa. México terminaría con 10 hombres pero jugando mejor, descontó con un tiro libre de Roberto Alvarado que con cierta fortuna nadie tocó para incrustarse en la portería japonesa.
En los minutos finales México con Antuna y Alvarado como alfiles estuvo cerca de empatar con un remate con la cabeza de Vladimir Loroña, pero al final no alcanzó.
Con esta derrota México buscará su pase a la segunda ronda ante Sudáfrica ya eliminado en Sapporo.