Apenas salió del túnel del Lumen Field y se volvió visible para la mayoría de los aficionados, Russell Wilson fue abucheado por la multitud que no reconoció a a su antiguo equipo en el que estableció un récord de franquicia de 292 victorias.
Wilson fue tratado como uno más en su regreso a Seattle y a pesar de tener una actuación de 340 yardas y un pase de anotación, no sirvieron para evitar la derrota de los Broncos 16-17 ante los Halcones Marinos.
La defensiva de Seattle tuvo dos jugadas de impacto al conseguir balones sueltos en zona de goal, que impidieron los puntos que hubieran significado el triunfo de los Broncos.
Denver perdió dos balones en acarreos desde la yarda 1. El último equipo en hacer eso en un juego fueron los Jefes en 1987, en una derrota de la Semana 4 .
En el momento en que Wilson fue canjeado a Denver en marzo, poniendo fin a su década como líder bajo el centro en Seattle, el juego de ayer quedó marcado. Y luego la NFL le hizo el honor de colocarlo como conclusión de la primera semana de la temporada regular.
Ahora guiados por Geno Smith, los Halcones Marinos se fueron al frente en el marcador con su primer drive ofensivo. Will Dissly atrapó un envío de 38 yardas de Smith para provocar el júbilo de los aficionados locales.
Tomando la responsabilidad de ataque de Seattle, Geno terminó la noche con 185 yardas y dos pases de anotación.
Wilson ganó 62 juegos como titular (regular y postemporada) en el estadio donde ayer actuó como foráneo y se unió a a Brett Favre y Tom Brady como los únicos mariscales de campo que comenzarán como visitantes en un estadio donde acumularon 50 victorias en casa.
El legado de Wilson en Seattle es incomparable, le dio un título de Super Bowl a la organización, pero ayer el pasado quedó fuera y los aficionados volvieron a desaprobar su marcha.