Cinthia Soto
Los Mochis, Sinaloa. – El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur, César Galaviz Lugo, señaló que este año 2023 ha sido un ciclo verdaderamente difícil para los productores agrícolas de Sinaloa y de México, por los múltiples factores que abonaron al pésimo escenario que se ha vivido.
Según datos del Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) de México al cierre del 2022, las importaciones de maíz han experimentado un aumento sostenido en los últimos cinco años. En 2018, México importó alrededor de 16.8 millones de toneladas de maíz, mientras que, en 2022, esa cifra aumentó a aproximadamente 20.5 millones de toneladas, lo que representa un incremento de casi el 22% en el volumen de importaciones en ese período.
La dependencia de las importaciones ha puesto en desventaja a los productores nacionales de granos. Muchos agricultores enfrentan dificultades para competir en el mercado debido a los costos de producción más altos que enfrentan en comparación con los productores extranjeros, quienes tienen subsidios por parte de sus gobiernos, siendo Estados Unidos quien brinda los mayores apoyos a sus agricultores y es a quien más le compra México maíz, entre más dependencia, más desventaja.
Reiteró el líder agrícola que, con la finalidad de garantizar el desarrollo integral de la producción de maíz nacional, el gobierno debe implementar mecanismos que brinden seguridad y estabilidad a los productores en términos de precios; algo que podría lograrse mediante la creación de fondos de estabilización para amortiguar las fluctuaciones de precios internacionales y proteger a los productores nacionales.