Bernardo Hurtado

Culiacán, Sinaloa.- Raquel Alcaraz es una mujer que el mercado Rafael Buelna ha visto crecer, y éste con sus años también ha visto muchas cosas.

Una de ellas fue la instalación del negocio de bonetería y juguetes del hombre que un día llevaría a aquella pequeña que hoy es la mujer al mando.

“¿Pues qué le diré? Yo aquí nací, aquí nací o sea aquí tengo ya bastantes años”.

A pesar de que la venta de bonetería en el tiempo que lleva ha sido difícil, su labor en su totalidad le gusta, atendiendo bien a su clientela a pesar del calor y las lluvias.

“Pues siguen, como estamos con el calorcito yo creo todo el mundo se está quejando de eso, del calor”.

El seguir vendiendo es algo que planea seguir haciendo hasta que pueda con los precios que suben y bajan, invitando a la visita no solo a ella, sino al algo decaído mercado en general.

“Pues un poco decaído, muy decaído pues hace falta clientela”.

Sin embargo, la decaída se puede considerar se limita a la falta de clientela, pues la perseverancia invitando a la sociedad es algo que el mercado no deja de observar.

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