Culiacán, Sin., a 16 de noviembre de 2023.- El arte y la literatura sirven como un desahogo, una manera de plasmar emociones que a veces son interiorizadas ya que son difíciles de expresar, dijo Martín Durán, quien presentó su libro “Ella cantaba corridos” durante el cuarto día de actividades de la Feria Internacional del Libro Culiacán 2023.
Durante el Foro de Autores realizado en el Mezzanine del Instituto MIA, el también periodista comentó que este libro consta de un volumen de cuentos escritos en un total de 120 páginas en las que se habla desde la violencia, el amor, la nostalgia, hasta situaciones cotidianas basadas algunas de ellas en historias reales.
Al respecto, Edgar García, quien fungió como comentarista, indicó que este es un libro donde el periodista aborda la violencia desde su punto de vista, algo que en el día a día quizá pasa desapercibido, mientras que Juan Veledíaz también periodista, resaltó que estos cuentos logran atrapar la atención del lector al ser narrados de una manera amena y hasta divertida.
Martín Durán dijo que esta publicación resume gran parte de su época como universitario, aunque fue en su adolescencia cuando inició a escribir, sin embargo, al llegar a la juventud fue cuando empezó a hacerlo en tiempo y forma, primero como periodista para ganarse la vida y después como una forma de descargar sus ideas y emociones.
Posteriormente, Alejandro García Ortega trajo consigo su libro “Dodecamerón, cuentos a caballo para pasar todo el año”, una obra que describió como producto del encierro como en los tiempos de la peste cuando la gente se refugiaba en la literatura para sobrellevar la epidemia.
El escritor e investigador estuvo acompañado por Juan José Macías y Mónica Muñoz como comentaristas, quienes destacaron que el autor es un ferviente amante de las letras desde los quince años y este libro resulta ser especial al abordarse desde lo narrativo hasta lo ensayístico y poético.
Asimismo, precisaron que la obra es un recurso ante las crisis y los duelos, pues los cuentos se plasman de una manera mágica que resulta ser especialmente atractiva para los lectores.
Alejandro García Ortega precisó que en la época de los 80’s radicó en Culiacán, donde aprendió una gran cantidad de cosas y por lo que tiene gratos recuerdos de esta ciudad.
En este sentido, consideró que los cuentos de su libro pueden ser leídos uno por día, ya que la extensión es corta pero interesante e innovadora.