Las imágenes satelitales de Landsat 8 son empleadas para monitorear la calidad del agua, lo que facilita la identificación de contaminantes, variaciones en la turbidez y la salud global de los ecosistemas acuáticos. Esta información es esencial para la gestión de recursos hídricos, la planificación de infraestructuras relacionadas con el agua y la toma de decisiones en sectores como la agricultura y la gestión ambiental, según afirmó un investigador posdoctoral universitario.
El doctor Alberto Quevedo Castro realiza actualmente una estancia posdoctoral en la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Espacio (FACITE) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) en la cual su propósito es estudiar parámetros de la calidad del agua como la clorofila A, sólidos disueltos totales y carbono orgánico total, cuyo propósito es determinar el modelo ideal para el objeto del estudio.
Y es que la presa Sanalona constituye la unidad de análisis de esta investigación. Una vez obtenido el modelo estadístico para estos parámetros, se pretende replicarlo en las demás presas del estado”, confirmó Quevedo Castro.
Señaló que la metodología para determinar la calidad del agua mediante imágenes satelitales utiliza diferentes técnicas, dependiendo del estudio a realizar, “en nuestro caso, extraemos puntos de muestreo proporcionados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en su monitoreo semestral. Utilizamos software de acceso abierto para comparar estos puntos con imágenes, extraer datos, procesarlos y obtener información relevante sobre los parámetros que investigamos.
Alberto Quevedo Castro resaltó la relevancia de esta investigación al proveer información fidedigna y validada a través de modelos estadísticos e imágenes satelitales. Esto capacita a los entes involucrados para tomar decisiones informadas utilizando herramientas factibles y actualizadas. Finalmente, expresó su gratitud a las autoridades de la FACITE por su apoyo en el estudio del impacto en el sector hídrico.