*El alcalde de Guasave precisó que trabajadoras que se mantienen en protesta, demandan bases sindicales; “Es un tema del STASHAG, y con respeto, en lo que podemos apoyar ahí hemos estado”, dijo
Culiacán, Sinaloa, a 02 de abril de 2024.- Para atender el reclamo que hacen cuatro mujeres, dos de ellas actualmente trabajadoras y las otras dos ex trabajadoras del Ayuntamiento de Guasave, quienes se manifestaron en la explanada central de Palacio de Gobierno en la capital del estado, el alcalde de ese municipio, Martín Ahumada Quintero acudió también a Culiacán para sostener una reunión con las inconformes y el encargado del Despacho de la Secretaría General de Gobierno, Rodolfo Jiménez, en donde el alcalde les hizo el ofrecimiento de mantenerlas en sus respectivos puestos de confianza y otorgarles un incremento salarial.
El presidente municipal señaló que el papel que desempeña el Ayuntamiento en esta situación es de mediador, pues las mujeres reclaman el otorgamiento de plazas al Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Guasave (STASHAG), mismas plazas que les habían sido autorizadas pero que no pudieron ser concretadas al no culminar su proceso de toma de protesta ante el propio sindicato que encabeza la secretaria general María José García Flores.
El alcalde Ahumada Quintero explicó que dos de las mujeres son actualmente trabajadoras de confianza del Ayuntamiento, ellas son Marcela Guadalupe Duarte Zambrano y Jesús Amelia Camacho Hernández, a quienes les hizo la propuesta de un incremento salarial de 4 mil pesos y mantenerlas en sus puestos de trabajo.
Cabe destacar que en su momento, estas dos trabajadoras recibieron el ofrecimiento de una base sindical durante la pasada gestión del entonces líder Alejandro Medina Pimentel, pero llegado el momento de rendir protesta ante la asamblea del sindicato, ahora encabezado por María José García, decidieron abandonar la asamblea y por ello no pudo concretarse el formal ingreso al STASHAG, que les habría dado el beneficio de la plaza sindical.
En estos dos casos, y como parte de la negociación con el Ayuntamiento, el STASHAG aceptó otorgar la base sindical que rechazó Marcela Duarte para un hijo o hija, mientras que ella podrá seguir como trabajadora de confianza, con el referido incremento de sueldo de 4 mil pesos que ofreció el alcalde Martín Ahumada.
El alcalde precisó que particularmente el caso de la señora Marcela Duarte es especial, pues su esposo era quien trabajaba en el Ayuntamiento y por una cuestión humanitaria y de solidaridad, se le ofreció trabajo a ella para el sostenimiento de su familia, y con el tiempo se planteó la posibilidad de otorgarle una plaza sindical, misma que ahora se ofrece para un hijo o hija, mientras que la señora Marcela tiene el ofrecimiento de continuar en su puesto con un aumento salarial.
Por lo que toca al caso de Amelia Camacho, ella no tiene parentesco familiar con ningún trabajador del Ayuntamiento, ni tampoco es hija de algún sindicalizado, y el ofrecimiento de la plaza sindical la recibió del anterior secretario general, Alejandro Medina Pimentel, plaza que rechazó y por ello el STASHAG aceptó asignarla a un familiar suyo, puesto que no tiene hijos, e igualmente seguir como personal de confianza al servicio del Ayuntamiento, también con el mismo incremento salarial.
El tercer caso es el de María Joaquina Rodríguez Valenzuela, quien en su momento heredó la plaza de Categoría Ayudante General de su padre cuando éste se jubiló, pero que rechazó al no cumplir con sus expectativas económicas, pues sólo se presentó un día a laborar y tras argumentar que merecía una categoría superior ya no se presentó, por lo que fue dada de baja por abandono de empleo. Aquí el STASHAG también ofreció recuperar esa base sindical del padre de la joven para otorgarla a algún otro familiar, mientras que a María Joaquina se le hizo el ofrecimiento de un puesto de confianza en la Unidad Administrativa del Gobierno del Estado en Guasave.
El alcalde Martín Ahumada explicó que el cuarto caso corresponde a una mujer policía, de nombre Cielo Carolina Aguirre Molinares, que causó baja de la corporación al no aprobar el examen de control y confianza, y quien fue puesta a disposición de la Comisión de Honor y Justicia para un proceso administrativo.
Explicó que esta situación tuvo lugar hace un año y 8 meses, sin embargo la ex policía siguió recibiendo su salario durante el primer año, y desde hace 8 meses ya no fue posible al sobreseerse un juicio de amparo que promovió. La propuesta para la ex agente es tramitar su retiro anticipado, ante la imposibilidad de reingresar a la corporación.