Bernardo Hurtado
Culiacán, Sinaloa.- Aun cuando Sinaloa se encuentra libre de rabia humana desde hace más de 36 años, está semana se continúa en la duplicación de acciones a favor de la prevención, reforzando, informó el Dr. Gerardo Kenny Inzunza Leyva, director de Prevención y Promoción de la Salud para Viva La Noticia.
Siendo este próximo 28 de septiembre el Día Mundial Contra la Rabia, compartió que esta semana se comenzó y continúa con el refuerzo en la campaña nacional de vacunación antirrábica en caninos y felinos.
“Y nos estamos enfocando mucho en la parte rural. La rabia pues es un virus que se transmite a través de algún animal que en este caso es principalmente al humano con contacto con algunos perritos y gatos que estén enfermos, pero también existe el riesgo de que nos contagien algunos animales por ejemplo zorros, mapaches, murciélagos, entre otros animales que se encuentran en la zona silvestre”.
Trasmitiendo a través de la mordedura de estos animales infectados, advirtió que estos llegan a producir mucho daño en el sistema neurológico de los seres vivos, habiendo entre los síntomas característicos hidrofobia y fotofobia, miedo o rechazo al agua y a la luz respectivamente.
“En la mayoría de los casos pues la rabia en humanos es letal, entonces por eso es muy importante que si alguna persona sufre la agresión de algún animal con algún comportamiento extraño o sospechoso, es importante que de forma inmediata acudan al sector salud para que reciban la vacuna antirrábica humana”.
Terminando la intensificación de acciones con la jornada este 29 de septiembre, añadió que los síntomas en humanos de la rabia son también fiebre, pérdida del apetito, malestar general, alucinaciones, espasmo muscular o parálisis de músculo, volverse agresivos e irritables, dolor de cabeza, convulsiones, cuello rígido y dificultad para tragar.
En animales, comentó que tienen un comportamiento parecido, errático, no atacando al humano comúnmente, sin embargo que de estar en zonas de exposición, de ver actitudes agresivas, que no se recomienda tocarlos, así como el contacto con animales fallecidos en tales zonas como la rural, campo o senderismo.
Unas de las profesiones que son vulnerables, son en la espeleología, mineros, quienes trabajan en las cuevas, veterinarios, debiendo aplicarse periódicamente la vacuna, teniendo sus protocolos anuales de prevención.