Michell Ramos
Culiacán, Sinaloa.- Salir avante del golpe económico que generó la pandemia a los negocios del Centro de Culiacán, les dejó una enseñanza humanitaria a Francisco Padilla y su hija Briceyda, ya que en su restaurante de comida rápida que mantienen abierto desde 1997, optaron por abrir el proyecto “Lunch Pendiente”, donde los propios clientes dejan pagado una comida especial que es regalada a quienes menos tienen.
“Cuando la pandemia inició había mucha gente que no podía pagar comida y tenía hambre y así le hacíamos pedían un lunch que es un sándwich y un agua de seiscientos entonces ellos vienen y los piden y se les da”
El costo del lunch que proviene de una tradición europea es de tan solo 23 pesos, con lo que se le otorga a los beneficiados un sándwich con agua embotellada, mismo que es de mucha ayuda para aquellos que no cuentan con el dinero suficiente para adquirir sus sagrados alimentos.
Las personas que más buscan los platillos gratis son indigentes y muchos que se quedaron sin empleo, y aunque existen días que nadie deja nada para poder otorgar un lunch, esto no es impedimento para que la familia Del Valle Natural deje de entregar la ayuda a quienes más lo necesitan.
“Hay veces que si dejan pagado , hay más de uno pagado o aveces no ahí o uno nada más y de todas maneras se da a las personas que lo vengan a pedir”
A estas alturas de la pandemia, el céntrico negocio ubicado en la calle Juan Carrasco recibe de dos a tres clientes que buscan el apoyo alimentario, por lo que la iniciativa llegó para quedarse, y ante esto, sus impulsores invitan a los ciudadanos a no limitarse y apoyar este tipo de acciones, con lo que ayudan a quienes se quedaron sin nada y a su vez impulsan la economía local…