La inteligencia artificial ha comenzado a formar parte de la vida diaria de millones de personas, de manera similar a lo que ocurrió con los buscadores web o las redes sociales. Sin embargo, su avance también ha generado inquietud, especialmente por el riesgo de que estas herramientas superen a los humanos en diversas tareas. Este temor ha sido abordado incluso en la ciencia ficción durante décadas.
Durante una entrevista en el pódcast oficial de OpenAI, el director ejecutivo de la compañía, Sam Altman, recomendó a los usuarios no entablar vínculos personales con la inteligencia artificial ni confiar ciegamente en sus respuestas. Señaló que los modelos como ChatGPT aún presentan errores debido a limitaciones tecnológicas conocidas como “alucinaciones”, en las que la IA entrega información incorrecta como si fuera verídica.
“La gente tiene un alto grado de confianza en ChatGPT, lo cual es interesante, porque la IA alucina. Debería ser la tecnología en la que no se debe confiar tanto”, afirmó Altman. Por ello, aconsejó utilizar siempre fuentes oficiales y considerar estas herramientas como apoyo, no como una voz de autoridad.
A pesar de que modelos como ChatGPT ya ofrecen resultados útiles en muchas áreas, OpenAI enfatiza que aún hay margen de mejora. Usar la IA como fuente principal en tareas profesionales sin verificar la información puede conducir a errores graves, afectando la calidad y la confiabilidad del conocimiento que se comparte.
