Mazatlán, Sinaloa. – La falta de agua en algunas colonias y el olor a gasolina que se desprendía en el Centro de la ciudad fueron ocasionados por trabajos que realizaban diferentes empresas, señaló Luis Gerardo Núñez Gutiérrez, gerente general de JUMAPAM.
Durante el fin de semana circularon en redes sociales denuncias por parte de ciudadanos mencionando que percibían el agua de sus hogares sucia y con un ligero olor a gasolina, lo que los alarmó ya que temían por su salud.
Ante esto, Núñez Gutiérrez aclaró que esto no se trató de alguna falla ocasionada por la paramunicipal, sino de un proceso de construcción privada donde cambiaron 2 kilómetros en 30 pulgadas, y esta tenía más de 24 horas seca.
“Es una interconexión que hizo una empresa, ellos abrieron una línea y cuando el agua de la lluvia cayó había un poquito de residuo de diésel que usaban para la máquina de soldar, se pudo haber introducido, ellos trabajaron la línea durante 32 horas y se pudieron haber ido pequeños residuos”, puntualizó.
El gerente general de la junta de agua potable y alcantarillado informó que por parte de Jumapam estuvieron trabajando junto al departamento de calidad de agua haciendo exámenes del vital líquido en la colonia centro, en los que se encontró que esto no afectará de manera negativa en la salud de los vecinos, pues el agua contenía 2.0 niveles de cloro.
Respecto a la falta de agua en los alrededores de la avenida Gabriel Leyva señaló que se trató de una empresa la que lo provocó, denunciando que han tenido este tipo de problemas constantemente con las empresas y a quien se “crucifica” es a la paramunicipal.
“Estamos batallando mucho con el tema de las constructoras, muchísimo porque el único que da la cara es JUAMPAM y pues ellos hacen y deshacen y no es jumapam, son las empresas que están trabajando. Vamos a decirlo, estuve muy preocupado el fraccionamiento del bosque estuvo sin agua durante el día jueves porque una empresa no tenía los materiales y se puso y abrió”, dijo.
Por último, añadió que esta problemática ya se está reportando con Obras Públicas Estatal, debido a que este tipo de situaciones con las constructoras se presenta de manera constante y “quien paga el pato” es la junta de agua potable.