La cifra supera en un 40% el hito precedente, y se atribuye a la mayor transmisibilidad de la variante Ómicron, pero no implica un aumento proporcional de hospitalizaciones, como apunta la directora del los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. En ese país, los nuevos contagios superan en 60% las estadísticas de la semana anterior. Al mismo tiempo, la curva de muertes asociadas al coronavirus se mantiene estable desde octubre.
La OMS informó que nunca antes vista de contagios de Covid-19 para el miércoles 29 de diciembre: 1.351.175 nuevos casos en 24 horas a nivel global, 40% más que el récord anterior, un aumento que podría atribuirse a la alta capacidad de transmisión de la variante Ómicron.
Sin embargo, por primera vez en el año, el nuevo pico no conlleva un incremento de hospitalizaciones ni de muertes asociadas al coronavirus, una curva que se mantiene estable entre 4.000 y 8.000 fallecimientos diarios a nivel mundial desde octubre.
Esta circunstancia no se había dado en las tres olas anteriores de este año, registradas en enero, abril y agosto, y podría deberse al aumento de la tasa de inoculación, pues las vacunas existentes protegen contra las formas más graves de la enfermedad.
Las cifras semanales en Estados Unidos han superado en 60% la cantidad de nuevos contagios, con respecto al mismo periodo en los siete días anteriores. La directora de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), Rochelle Walensky, informó que las hospitalizaciones han aumentado en un 14%.
Los CDC anunciaron el miércoles una reducción del periodo de aislamiento de las personas que registren un resultado positivo, de 10 a cinco días. “Ahora sabemos que del 85 al 90% de la transmisión viral ocurre en los primeros cinco días”, explicó Walensky en su cuenta de Twitter. “Durante ese periodo queremos que la gente se quede en casa y aislada, y luego use mascarillas por cinco días adicionales para capturar el 10 a 15% restante”.