En Sinaloa se tienen registrados 22,512 pescadores, más de 54% de ellos están en los municipios de Ahome y Mazatlán. Oceana estima que, si las condiciones actuales de sobrepesca continúan, las especies pesqueras podrían llegar a deteriorarse hasta un 50%, lo que podría afectar hasta en un 75% el volumen de pesca. Así, en Sinaloa, la pobreza entre los pescadores más vulnerables, aproximadamente 18,500, podría aumentar casi un 50%. Renata Terrazas, Directora de Oceana México aseguró: “De continuar ignorándose la relevancia de la pesca en Sinaloa, se estará condenando a los pescadores más vulnerables a la pobreza.”
Dada la situación tan precaria en la que vive una parte importante de los pescadores en Sinaloa, cualquier cambio negativo, por menor que sea, puede afectar gravemente sus ingresos. La reducción en el número de peces en el océano envía directamente a un gran número de pescadores a la pobreza. Es importante reconocer que con un ingreso de $1,800 pesos mensuales, el 50% de los pescadores ya se encuentran por debajo de la línea de pobreza, cualquier choque simplemente aumentaría la precariedad de sus vidas.
En Sinaloa, en general, el estado oficial de los recursos aprovechados está catalogado como “en el máximo rendimiento sostenible” (MRS); mientras que las pesquerías de tiburón, cangrejo, escama marina y almejas se encuentran en “sobrepesca”.
Si bien todos los municipios costeros presentan sobrexplotación en al menos una de sus pesquerías, debe ponerse especial atención en aquellos donde los índices de pobreza y marginación amenazan a gran parte de los pescadores, debido al agotamiento de las especies más importantes. Este riesgo se agrava por la falta de acciones que aseguren la recuperación de las especies deterioradas.
Si el gobierno de Sinaloa quiere asegurar la subsistencia de los pescadores más pobres debe exigir al gobierno federal que garantice la recuperación de las especies sobrexplotadas, para ello es necesario:
1. Obligar la intervención de las autoridades para la restauración de especies sobrexplotadas;
2. Establecer planes obligatorios de restauración pesquera;
3. Reconocer a las especies en malas condiciones a través de la Carta Nacional Pesquera, y
4. Asegurar la participación de los pescadores en el proceso de restauración.