Bernardo Hurtado
Culiacán, Sinaloa.- Este martes 17 de diciembre fue realizada la entrega de 63 sillas de ruedas deportivas para basquetbol a 8 equipos del estado, en el polideportivo ‘Juan S. Millán’ de Culiacán.
Tras el mensaje de bienvenida a cargo de Héctor Meléndez Cano, coordinador del programa del deporte adaptado de DIF Sinaloa incluyente, y realizando la primera parte de la entrega de bicicletas, el Lic. Saúl Saldaña, presidente de la Asociación de Caballeros de Culiacán, compartió en su mensaje su agradecimiento por ser participe en el evento, siendo días incómodos desde la sociedad.
“Vienen temporadas difíciles para CIBACOPA y para Caballeros por la situación que impera, pero queremos refrendar el compromiso. El próximo año CIBACOPA cumple 25 años como liga, es el único estado Sinaloa, Gobernador, que tenemos 4 equipos profesionales gracias a Dios y al apoyo de todos y cada uno de ustedes. El basketball es algo que hace ilusiones y la verdad no lo pongo como parte de un negocio de los que realizo en mi vida diaria, sino mi aportación o mi granito de arena a la sociedad”.
Beneficiando a 63 deportistas de 7 municipios de Sinaloa con sillas de ruedas para baloncesto, el Gobernador Constitucional del Estado Ruben Rocha Moya compartió su complacencia con la buena recepción de las sillas, señalando que el mayor éxito que tienen los deportistas es con la compañía de sus familias.
“Una familia que tiene a una persona con discapacidad que se sienta privilegiado, y si creen en Dios, de allá se los mandaron, y aquí se sabe si realmente amamos al prójimo. Yo les digo: yo cuando llegué lo primero que hice fue instituir la pensión para todas las personas con discapacidad, estaban hasta los 29 años, los di hasta los 64 años. ¿Cuánto nos costaba eso? 600 millones de pesos al año, tenemos 50 y tantos mil personas con discapacidad, pero les digo, es la mejor obra que podría haber hecho para lucirme, con alguna obra cada año con ese recurso, es la obra, esa es la mejor”.
Con ello, concluyó comentando que lo importante es que las personas que viven con discapacidad estén integradas como cualquier otra persona a la sociedad, teniendo vida propia.