Europa volvió a ser el epicentro del fútbol mundial con una fecha FIFA espectacular.
España deslumbró con una goleada 6-0 sobre Turquía, recuperando el estilo que la hizo grande: precisión en los toques, presión alta y un ataque implacable. Alemania, fiel a su disciplina y eficacia, se impuso 3-1 a Irlanda del Norte, confirmando su papel de potencia sólida en la clasificación.
Estos resultados reflejan realidades opuestas: España y Alemania ratifican su estatus de candidatas a lo más alto, mientras que Turquía mostró preocupantes carencias defensivas e Irlanda del Norte luchó con garra, pero evidenció sus limitaciones.
Una jornada que recordó por qué el fútbol europeo es garantía de espectáculo y emoción en cada fecha.