A pesar de la alta expectativa por el Día de Muertos, los floristas locales en Culiacán enfrentaron una temporada difícil en ventas.
Las condiciones económicas, el retraso en la llegada de mercancía y la reducción del poder adquisitivo afectaron de forma considerable el flujo de clientes durante el 1 y 2 de noviembre.
Celso Vázquez, vocero de los floristas, señaló que las ventas no alcanzaron los niveles esperados y que muchos comerciantes terminaron con flores sin vender.
“No se me vendió como yo quería, me quedó mercancía, a pesar de todo, vendí solo un 30 por ciento respecto a otros años”.
Además de las bajas ventas, los floristas también enfrentaron pérdidas por el retraso en el transporte de flores desde Michoacán, lo que afectó la calidad del producto.
Aun así, Vázquez aseguró que el oficio sigue siendo su principal sustento.
“A pesar de todo, es lo que sé trabajar, flores. Y aquí me voy a morir, entre las flores”.
Aunque el movimiento en los panteones continúa algunos días después de las fechas principales, los vendedores esperan que el flujo de personas incremente ligeramente antes de dar por concluida la temporada.
