La Fiscalía de París abrió una investigación penal contra las plataformas de venta en línea Shein, Temu, AliExpress y Wish por la presunta difusión de contenidos violentos o pornográficos accesibles a menores, informó este martes el Ministerio Público francés. La denuncia fue presentada por la Dirección General de Protección de los Consumidores y el caso fue remitido a la Oficina Nacional del Menor, encargada de indagar posibles violaciones al código penal.
De acuerdo con la Fiscalía, las empresas enfrentan acusaciones por permitir la circulación de mensajes o materiales degradantes y violentos que podían ser consultados por menores de edad, delitos que pueden implicar penas de hasta tres años de prisión y multas de 75 mil euros para los responsables. En el caso de Shein y AliExpress, la investigación se amplía por presunta difusión de imágenes de menores con connotación sexual, que podría elevar las sanciones a cinco años de cárcel.
El anuncio se produce en vísperas de la apertura de la primera tienda permanente de Shein en los grandes almacenes BHV de París. El ministro de Economía francés, Roland Lescure, advirtió que podría prohibir la marca en el país si se comprueba que la plataforma permitió la venta de productos inapropiados, luego de que un organismo de consumidores detectara muñecas sexuales con apariencia infantil en su catálogo. Shein aseguró que colaborará plenamente con las autoridades y proporcionará los datos de los vendedores y compradores implicados.
Por su parte, Temu declaró a la agencia Reuters que las acusaciones en su contra se refieren únicamente al acceso de menores a ciertos productos, y que no está siendo investigada por pornografía infantil. Mientras tanto, las autoridades francesas ampliaron sus pesquisas a otras plataformas digitales, incluyendo una investigación paralela sobre TikTok por el posible riesgo de que sus algoritmos promuevan conductas autodestructivas entre jóvenes.
La fiscal de París, Laure Beccuau, explicó que el caso de TikTok se abrió a petición de una comisión del Parlamento francés y será conducido por la brigada de ciberdelincuencia. Las pesquisas buscan determinar si la red social incurrió en los delitos de “propaganda a favor del suicidio” o “facilitación de transacciones ilegales en banda organizada”, sancionados con penas de hasta 10 años de prisión y multas que superan el millón de euros.
