En una de las rivalidades más feroces que existen en la National Football League, los Cafés de Cleveland consiguieron el primer triunfo de la Semana 3 al derrotar 29-13 a los Acereros de Pittsburgh que hilvanan derrotas.
Sin Ben Roethlisberger por primera ocasión en 18 temporadas, los Acereros ingresaron al First Energy Stadium con una supremacía sobre Cleveland de 38-9-1 que se remonta a 1999, cuando el equipo regresó a la liga. Durante ese lapso, Pittsburgh barrió la rivalidad en 16 ocasiones.
Pero como Mike Tomlin, head coach de los Acereros dijo antes del partido, “los números se quedan en los libros”.
La historia no jugó para los Acereros que ahora están en el fondo de la división, donde los Cafés son líderes.
Los Cafés aprovecharon que la ofensiva de los Acereros aún se encuentra oxidada y ellos apostaron por mover el balón sobre todo en la segunda mitad cuando Nick Chubb en acarreo de una yarda coronó una serie que consumió 11 yardas para avanzar 80 yardas y terminar en las diagonales con el touchdown que amplió la ventaja para el equipo de Cleveland.
Una semana después de dejar escapar una ventaja de 13 puntos en los últimos dos minutos contra los Jets de Nueva York, los Cafés aprendieron la lección y aunque aceptaron un gol de campo dentro de los dos minutos finales, lograron resistir con la victoria hasta el final.
Chubb culminó la noche como el hombre del partido al sumar 105 yardas en 16 acarreos.
Nick Chubb anotó tres touchdowns terrestres contra los Jets, el segundo juego de su carrera con tres touchdowns y aunque ayer sólo ingresó en una ocasión, queda claro que es la bujía de los Cafés mientras Deshaun Watson no termine con su castigo de ocho partidos que le impuso la NFL por agresión sexual contra múltiples mujeres.
Mitch Trubisky no logró desplazar el ataque de Pittsburgh como a Tomlin le hubiera gustado.