El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, confirmó que el tema del arancel impuesto por Estados Unidos al tomate mexicano ha sido abordado directamente con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien ha expresado su compromiso de buscar una solución favorable para los productores sinaloenses.
El mandatario estatal afirmó que Sheinbaum Pardo está buscando que este asunto tenga una buena salida.
Rocha Moya señaló que desde la visita presidencial se ha mantenido comunicación con Mario Haroldo Robles Escalante, representante histórico del sector tomatero desde 1996 y actual gerente de la Comisión para la Investigación y Defensa de las Hortalizas (CIDH).
Robles Escalante ha sido pieza clave en las negociaciones bilaterales y en la defensa comercial del tomate mexicano.
El gobernador destacó que la presidenta ha instruido mantener el respaldo al sector y continuar las gestiones necesarias para mitigar los efectos de la cuota compensatoria del 17.09% impuesta por el Departamento de Comercio de EE. UU., la cual representa un impacto económico estimado de 540 millones de dólares anuales.
El dirigente de la CIDH ha advertido que esta medida podría provocar una reducción del 10 al 15% en la superficie sembrada en el ciclo otoño-invierno, afectando directamente la producción, el empleo agrícola y la derrama económica en Sinaloa. Se estima que más de 50 mil empleos directos en el estado dependen de esta cadena productiva.
El gobierno estatal y federal continúan en coordinación con líderes agrícolas y autoridades comerciales para definir una ruta que permita restablecer condiciones viables para la exportación del tomate sinaloense.