Los principales medios de comunicación de Estados Unidos se han negado a firmar las nuevas normas propuestas por el Pentágono para los periodistas que cubren noticias relacionadas con el Departamento de Defensa. Estas normas buscan restringir el acceso a información no autorizada y limitan la capacidad de los reporteros para difundir ciertos contenidos. El plazo para aceptar la política, que vence este miércoles, ha generado controversia y rechazo entre los medios más influyentes del país.
Cadenas como Fox News, ABC News, CBS News, CNN y NBC News, entre otras, han emitido un comunicado conjunto en el que denuncian que estas medidas «limitan la capacidad de los periodistas para mantener informado al país». Además, calificaron la política de «sin precedentes», asegurando que pone en peligro las protecciones fundamentales del periodismo, y advirtieron sobre los riesgos de un control excesivo sobre la información.
La crítica a las nuevas normas no se limita solo a las cadenas de televisión. También se han sumado medios como Associated Press, Reuters, The New York Times, The Washington Post y Politico. Todos ellos rechazan las restricciones impuestas por el Pentágono, considerando que podrían perjudicar la libertad de prensa y el derecho a la información.
El plazo para que los periodistas acepten las nuevas normas expira este miércoles, y hasta ahora, solo el canal conservador One America News ha firmado el documento. Esta política exige a los reporteros comprometerse a no divulgar información clasificada ni documentos sensibles, incluso si no están marcados oficialmente como secretos, lo que aumenta el control del Departamento de Defensa sobre los contenidos que se difunden.
El Pentágono anunció esta medida en septiembre, señalando que los periodistas solo podrán acceder a sus instalaciones si aceptan las restricciones. Según el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, este control adicional sobre la información busca proteger los intereses de seguridad nacional, aunque los medios y los defensores del periodismo independiente consideran que puede limitar gravemente la libertad de prensa en Estados Unidos.
