Ante la solicitud de apoyo por parte de jubiladas y jubilados de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), la diputada María Teresa Guerra Ochoa, presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, se pronunció a favor de abrir una mesa de diálogo que permita atender sus inquietudes de manera responsable y respetuosa.
“Soy partidaria de que se escuchen todas las voces. Entendemos la preocupación de los jubilados, especialmente por el riesgo que perciben sobre sus prestaciones contractuales. La Universidad debe permitir que ejerzan su defensa legal sin represalias”, expresó la legisladora, quien también forma parte del sector jubilado.
Guerra Ochoa subrayó que la mayor parte del subsidio universitario proviene del ámbito federal, por lo que la mesa de diálogo debe incluir a autoridades nacionales. “Hay voluntad política para abrir ese espacio. Si no se da al interior de la Universidad, debe escalarse al gobierno federal”, afirmó.
Respecto al tema de auditorías, la diputada explicó que los fondos federales deben ser revisados por la Auditoría Superior de la Federación, mientras que los ingresos estatales corresponden a la Auditoría Superior del Estado. Actualmente existe una controversia jurídica sobre la fiscalización de ingresos propios de la UAS, aún sin resolución.
“Como Congreso respaldamos la transparencia y la austeridad. Coincidimos con los jubilados en que debe revisarse la nómina de personal de confianza. Pero también debemos buscar la viabilidad financiera de la jubilación dinámica, una prestación significativa que debe preservarse con responsabilidad”, añadió.
Sobre las denuncias de amenazas por parte de la rectoría, Guerra Ochoa fue enfática: “No debe haber represalias. Esa tentación no la debe tener el rector. La Universidad debe permitir que los jubilados acudan a los tribunales si así lo deciden”.
Finalmente, reiteró que el Congreso está obligado a respetar la autonomía universitaria, pero también a observar con atención las tensiones que se han generado. “El diálogo no ha fluido, y eso ha paralizado a las partes. Nuestra responsabilidad es contribuir a que se restablezca la comunicación y se preserve la paz laboral”, concluyó.






















