Dos casquillos de bala, manchas de sangre y un celular quebrado, fueron marcados como evidencia por peritos de la Fiscalía General del Estado, en la zona donde fue privado de la libertad el periodista sinaloense, Luis Enrique Ramírez.
El trabajo de campo se llevó a cabo junto a una marisquería y un expendio de cerveza que se encuentran ubicados sobre la calle Río Acaponeta casi esquina con la avenida Guadalupe Victoria, en la colonia Los Pinos.
Otros indicios fueron marcadas sobre la calle Juan de Dios Bátiz muy cerca del domicilio del comunicador, entre ellos varias manchas de sangre que corrían a lo largo de la banqueta, desde la calle Río Acaponeta hasta la Juan de Dios Bátiz.
Junto a un macetero fue hallado un celular quebrado, presuntamente propiedad del comunicador, por lo que se presume que el también columnista fue herido en el sitio donde fue ‘levantado’.
Las diligencias duraron poco más de dos horas en el lugar, tiempo en el que la Policía de Investigación brindó apoyo al personal de periciales de la Fiscalía de Justicia de Sinaloa.