El regreso de Ignacio “Nacho” Ambriz al banquillo del Club León ha despertado la ilusión entre la afición esmeralda.
Bajo su mando, el equipo vivió uno de sus mejores momentos futbolísticos, con un estilo ofensivo que lo consolidó como protagonista en la Liga MX.
Ahora, vuelve con la misión de recuperar la garra del equipo en un torneo que exige resultados inmediatos.
Más que un movimiento táctico, su retorno es un mensaje contundente: León quiere volver a competir en lo más alto. Ambriz aporta experiencia, conocimiento del plantel y la capacidad de inyectar confianza en un vestidor que necesitaba un cambio.
La Fiera vuelve a rugir con su viejo domador.






















