En el marco de la celebración del Día de Muertos, la esotérica y dueña de un centro espiritual en la ciudad, Sandra Sauceda, compartió algunas recomendaciones para preparar los altares y atraer energías positivas durante estas fechas tan representativas para la cultura mexicana.
Sauceda explicó que la tradición de colocar ofrendas no solo tiene un significado simbólico, sino también espiritual, pues es una forma de abrir el corazón y el hogar a las almas que regresan.
“Las ofrendas guían el camino de nuestros seres queridos que partieron; se dice que ellos regresan este día a brindarnos amor, y nosotros les ofrecemos paz y luz para esperarlos hasta el próximo año”.
Los elementos básicos del altar como las velas, el agua, la sal y la cruz cumplen una función energética y espiritual, las velas representan la luz que guía a las almas, el agua simboliza la fe, y los niveles del altar reflejan los distintos planos de existencia.
Sauceda recordó que puede realizarse de dos, tres o hasta siete niveles, dependiendo del simbolismo que se desee incorporar.
Asimismo, destacó que cada elemento debe tener un propósito personal.
“Es bueno poner en el altar todo lo que te recuerde a tu ser querido: su comida favorita, alguna prenda o fotografía, todo lo que te haga sentir más cerca de ellos”.
La esotérica también sugirió que, en caso de que exista un duelo prolongado o emociones no resueltas, se puede escribir una carta de perdón y gratitud para ayudar a liberar tanto a las almas como a quienes permanecen en vida.
De esta forma, el Día de Muertos se convierte no solo en una celebración de recuerdo, sino también en un ritual de reconciliación y energía positiva, que mantiene viva una de las tradiciones más emblemáticas de México.






















