Las lluvias que se presentaron de manera intermitente en la ciudad y la suspensión del servicio de transporte urbano durante varias horas fueron factores que incidieron para que el mercado municipal José María Pino Suárez tuviese una afluencia muy baja; sin embargo, el 95% de los puestos estuvieron trabajando con normalidad.
Alejandro Ontiveros Aramburo, líder de los locatarios, informó que a pesar de las condiciones climatológicas el mercado laboró de manera normal en horario de 5 de la mañana a 5 de la tarde; sin embargo, hubo ciertos negocios que no pudieron abrir, y la afluencia de clientela bajó de manera considerable desde muy temprana hora.
Ontiveros Arámburo externó que esperan que esta situación se reestablezca una vez pasados los efectos de la depresión tropical “Norma”; pues sin duda, representa un duro golpe para las ventas.
En cuanto a las afectaciones que se llevaron a cabo en la estructura en general, Alejandro Ontiveros comentó que fueron mínimas, solo algunas filtraciones en algunas partes del mercado que ya son resultado de la antigüedad que tiene este edificio; sin embargo, eso no fue inconveniente para que los locatarios pudieran brindar el servicio, y para el día de mañana se tienen mejores expectativas.