Bernardo Hurtado
Culiacán, Sinaloa.- Para preparar a los niños que van a ingresar a preescolar o a primaria y que no les afecte la separación, los padres deben promover el proceso de maduración, informó el Psicólogo Miguel Angel Avilés Castañeda para Viva La Noticia.
Existiendo los conceptos de ‘separación e individuación’, así como ‘objeto transicional’, señaló hay niños que les cuesta separarse de sus padres y vivir su proceso de independencia.
“El niño primeramente debe experimentar el cuidado de sus padres que son cercanos y amorosos con él, pero en algún momento está seguridad y confianza se debe introyectar por parte del niño, vamos a llamarlo así también ‘confianza básica’, o también desde otra teoría de la psicología podríamos llamarlo ‘apego seguro’, y en esta medida el niño se va separando con confianza poco a poco se sus padres, no es una situación que sea solamente problema del niño, sino que es un aspecto de madurez que los padres deben de promover”.
Habiendo madres a las que les preocupa la separación de sus hijos, teniendo dificultades para promover la separación, informó con esto éstos tendrán problemas para lograrlo, no pudiendo introyectar el auto cuidado.
Es así, que si al niño o a los padres les cuesta dejarlos en preescolar, los mayores deben tratar de verse a si mismos para saber qué tanto facilitan la separación.
“Si ellos como papás se angustian al separarse de sus hijos, aunque ellos no sean muy conscientes los niños van a ver en sus rostros esta dificultad o está angustia, y también se van a preocupar por la separación”.
Respecto al concepto ‘objeto transicional’ informó los padres deben preguntar a preescolar si se da permiso de que el menor pueda llevar consigo un muñeco de peluche o cobija para sentir seguridad, siendo importante sea permitido por sus padres para que poco a poco se vaya transitando a la autonomía.
Con ello, que se debe reconocer y observar que el proceso de autonomía es natural en todos los pequeños, siendo tarea de los padres reconocerlo no debiendo ser aprehensivos o preocuparse demasiado, ya que se entorpece.