Este viernes, Marcelo Ebrard y su esposa, Rosalinda Bueso, inauguraron en la alcaldía Tlalpan la primera Casa Violeta en la Ciudad de México. De manera simultánea, dieron el banderazo a otros 199 inmuebles distribuidos en toda la república, a los que además se sumarán brigadas y módulos móviles para informar sobre el Pasaporte Violeta.
Tras cortar el listón y develar la placa inaugural al lado de su esposa, Marcelo dijo: “Tenemos ya 203 Casas Violeta en una red nacional, en este momento de apoyo, de respaldo, de organización. Son autogestivas y más adelante, con el respaldo de la sociedad, podremos hacerla ya una red conectada a todas las instituciones de gobierno”.
Administradas por mujeres marcelistas, estas casas por lo pronto funcionarán como centros de orientación, información y capacitación en temas legales, de salud y protección contra la violencia de género, y forman parte de la estrategia integrada en los cuatro aspectos vitales del Pasaporte Violeta:
1. Mayor bienestar, con un sistema nacional de cuidados y 3000 pesos al mes para las madres y jefas de familia que los necesiten.
2. Seguridad, con líneas de emergencia, acompañamiento y protección en caso de violencia de género y acceso a las Casas Violeta.
3. Salud sexual, mental y reproductiva, con servicios gratuitos de mastografías, Papanicolaou, ayuda psicológica, asesorías en nutrición y fomento al deporte.
4. Vida sin límites, con becas de estudio, préstamos y Fondo ELLAS para tener acceso a servicios financieros.
Durante el recorrido por el inmueble de Tlalpan, Marcelo apuntó que ya tiene listo un Pasaporte Violeta para Claudia Sheinbaum.
Debate sin debate y un frente chimuelo
En su encuentro con medios, Marcelo consideró que el debate de ayer entre Xóchitl Gálvez y los otros aspirantes a encabezar el bloque opositor contra la 4T careció de propuestas: “Confirma dos cuestiones, más allá de lo aburrido del formato, porque no hubo debate de nada: primero, la superioridad ideológica y política de la Cuarta Transformación”, expuso. “Ahora están asumiendo la defensa de tesis que durante casi 40 años rechazaban en todas las materias, principalmente programas sociales, pero no solo eso.”
“Veo que no tienen una alternativa para el país”, continuó. “Veo que están todavía muy anclados en el pasado. Todavía no comprenden bien por qué ganó la 4T y por qué la fuerza que tiene.”
Marcelo señaló que la cifra de disminución de la pobreza a pesar de la pandemia —con cerca de seis millones de personas más que ya no la padecen en México— es devastadora para ellos, pues fue algo que no consiguieron en todos los años que gobernaron.
“Es un frente que además ya no es frente porque ya se desfrentó. Se salió el PRD. Ahora le faltan letras. Se quedó chimuelo: es un frente chimuelo”, ironizó y, considerando que al parecer ellos también ofrecen mantener y respaldar las iniciativas de la 4T, remató: “Mejor la 4T, ¿no? ¿Para qué queremos a estas personas?”.