La Semana 7 de la NFL es oficialmente historia tras la doble cartelera del Lunes por la Noche, donde los locales impusieron condiciones.
En el primer turno, los Detroit Lions rugieron fuerte en casa y confirmaron que son un contendiente de peso en la Nacional, dominando 24-9 a los Buccaneers con una actuación espectacular del novato Jahmyr Gibbs, quien fue una auténtica pesadilla imparable para la defensiva de Tampa.
Más tarde, en el cierre de la jornada, los Seattle Seahawks hicieron valer la ruidosa localía del Lumen Field.
En un partido mucho más defensivo, apretado y táctico, lograron sacar una victoria vital y sufrida sobre los sorprendentes Houston Texans, cerrando la semana con un triunfo clave para sus aspiraciones en la Conferencia Oeste.






















