En medio de un septiembre que sigue marcado por la violencia en diversas sindicaturas de Sinaloa, el profesor Oscar Loza Ochoa, presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), expresó su preocupación ante los incidentes que han afectado a comunidades del estado.
Loza Ochoa destacó la llegada de varias familias a la comisión, quienes buscan asesoría y apoyo ante acciones fuera de la ley por parte de autoridades federales, en particular en la sindicatura de Las Tapias.
Según el titular de la CEDH, estos hechos han sido reportados no solo en Las Tapias, sino también en otras zonas como Agua Caliente de Los Monzón y Villa Juárez donde la violencia ha incrementado.
En este último lugar, el panorama es tan preocupante que los maestros han manifestado su temor de que las clases puedan regresar a modalidad virtual, algo que afectaría seriamente el aprendizaje, según Loza Ochoa.
«Me duele mucho que se vuelva a clases virtuales, porque no hay como las clases presenciales ¿Qué puedo decir yo que estuve 43 años en el aula?, la educación presencial es crucial, especialmente en áreas como ingeniería y medicina, donde los aprendizajes prácticos no pueden ser replicados de forma virtual».
Otro tema que ha preocupado al presidente de la CEDH son las demandas del personal médico del Hospital General de Culiacán, quienes han solicitado no atender a personas heridas por armas de fuego, debido al peligro que esto representa.
Loza Ochoa señaló que, aunque el personal tiene razones para sentirse alarmado, es esencial que los hospitales públicos sigan siendo el lugar de atención para este tipo de víctimas, no obstante, subrayó que las autoridades ya han comenzado a acondicionar el viejo Hospital General para separar a los heridos de bala y mitigar riesgos.
«Las medidas que se tienen que tomar en esos casos deben ser extremas, porque la seguridad del personal y los pacientes debe ser una prioridad».
A pesar de los esfuerzos de las autoridades para implementar medidas de seguridad, Loza Ochoa advirtió que el incremento de la violencia sigue siendo un desafío y una grave preocupación para las comunidades más vulnerables del estado.
En este contexto, la CEDH se prepara para emitir una serie de recomendaciones a las autoridades, con el fin de garantizar el respeto a los derechos humanos y la seguridad de la población.
La situación en Sinaloa sigue siendo compleja, y tanto autoridades como ciudadanos deberán trabajar juntos para enfrentar los retos derivados de la violencia y asegurar que los servicios básicos como la educación y la salud no se vean interrumpidos.






















