Culiacán, Sin., a 23 de junio de 2021.- Tras 12 años de permanecer desactualizado y obsoleto para los requerimientos de consulta en las labores de prevención y ordenamiento urbano, hoy fue entregado de manera oficial el nuevo Atlas de Peligros y/o Riesgos del Municipio de Culiacán.
Durante la ceremonia llevada a cabo en el Salón de Cabildos, el alcalde Lic. Jesús Estrada Ferreiro resaltó que dicho documento es un parteaguas en el ejercicio público de la administración municipal al ofrecer información precisa para la prevención de daños físicos, materiales, pérdidas de vida y el patrimonio de las personas ante la presencia de fenómenos meteorológicos o diferente índole que pongan en riesgo la salud pública.
“Este atlas es un instrumento sumamente importante que nos ayuda a estar mejor preparados para reaccionar en situaciones de emergencia; sin duda, será de mucha utilidad porque Culiacán posee zonas inundables debido al desnivel que tiene el terreno en todo el municipio porque hay montañas, mar, ríos, arroyos y planicies”, mencionó.
El primer edil dijo que además de ampliar las maniobras de rescate y auxilio, el Atlas de Peligro y/o Riesgos permitirá controlar el desarrollo urbano de Culiacán de mejor manera, pues a partir de hoy todo aquel crecimiento de la ciudad tendrá que ser debidamente planeado basándose en este documento.
Por su parte, Marco Antonio Martínez de Alba, director general de la Coordinación Municipal de Protección Civil, destacó que hoy se da un gran paso después de más de 12 años de olvido de este documento, hoy se tiene un trabajo veraz y oportuno para la toma de decisiones para acciones de prevención y planeación.
Finalmente, Óscar Almanza Tovar, representante de la empresa Geolmex encargada de la realización del proyecto del Atlas, señaló que la elaboración del mismo se hizo con los más altos estándares de calidad, siempre apegados a los lineamientos establecidos por el Centro Nacional de Prevención de Desastres.
Como resultado, hoy se cuenta con un documento altamente calificado, donde se identifican aquellas zonas de vulnerabilidad y susceptibilidad donde se podrían registrar problemáticas y/o afectaciones en asentamientos humanos derivados de fenómenos geológicos, hidrológicos, antrópicos y atmosféricos.