Irene González
Culiacán, Sinaloa.- La Comisión de Protocolo y Régimen Orgánico Interior del Congreso del Estado aprobó dictamen que declara “Beneméritos” a los personajes Inés Arredondo, Óscar Liera y Felipa Velázquez López, e inscribir estos nombres en el Muro de Honor del Salón de Sesiones.
El diputado Daniel Antonio Cisneros Castro, señaló que este reconocimiento es para el dramaturgo Jesús Óscar Cabanillas Flores, mejor conocido como Óscar Liera; la escritora Inés Amelia Camelo Arredondo, cuyo nombre literario es Inés Arredondo, y Felipa Velázquez López.
En las fundamentaciones del dictamen se destaca que Óscar Liera nació en Culiacán el 24 de diciembre de 1946. Formó el Taller de Teatro de la Universidad Autónoma de Sinaloa (TATUAS) y otros grupos de teatro en el norte y sur del estado.
El salto de Óscar Liera como dramaturgo fue con la escritura y montaje de sus grandes obras sociales, como El jinete de la divina providencia, Camino rojo a Sabaiba y Los caminos solos.
Por su parte Inés Amelia Camelo Arredondo nació en Culiacán el 20 de marzo de 1928. En la Ciudad de México estudió en la Escuela de Filosofía y Letras de la UNAM, donde creó un grupo de teatro y montó obras en los escenarios universitarios.
Su primer libro fue “La señal”, con el que obtuvo un éxito de la crítica. Obtuvo el premio Xavier Villaurrutia con su segundo libro “Río Subterráneo”. Desde la salida de su primer número Inés Arredondo fue considerada una escritora de culto y obtuvo el reconocimiento unánime de los escritores de La Generación del Medio Siglo.
“Felipa Velázquez López nació en La Noria, Mazatlán el primero de mayo de 1882, y aunque autodidacta llegó a ser profesora, compositora y poeta, pero también pionera del movimiento agrarista en 1930, por lo que pagó con cárcel en el Valle de Mexicali, en 1930, acusada de quemar un puente de madera fue detenida junto a sus hijos para ser enviada a las Islas Marías.
Desde su llegada al Valle de Mexicali, Felipa destacó en la organización de los grupos campesinos que realizaban reuniones de manera clandestina para luchar por la dotación de tierras de lo que hoy son los ejidos Cuernavaca e Islas Agrarias, la represión sufrida es reconocida como el antecedente del movimiento agrarista llamado El Asalto a las Tierras.
Por su participación en la lucha social, el nombre de Felipa Velázquez López se encuentra en el Muro de Honor del Congreso de Baja California en un sitio 2 definido como Sala de Mujeres Forjadoras de Baja California al Servicio de la Patria.