Irene González
Ante el reto lanzado por Adolfo Beltrán Corrales a Sebastián Zamudio para que le demuestren con pruebas que hizo mal uso de los recursos del PAN cuando fue el tesorero, el secretario general del partido Loar López Delgado dijo que no se trata de un tema de retos personales sino que se está atendiendo un mandato del Comité Ejecutivo Nacional a raíz de su destitución como tesorero.
Señaló que debido a que hubo inconformidades ante esta decisión se acordó solicitar una auditoria el periodo en el que Adolfo Beltrán manejo las finanzas del partido y se contrató a un despacho externo que les dio resultados preliminares que fueron dados a conocer porque por ética y moral que se tienen que presentar ante la ciudadanía.
“No es una guerra de ángeles contra demonio, no es un tema personal, es un tema de institucionalidad que el proceso se ha estado siguiendo tan se siguió ese proceso que en septiembre de 2018 la Comisión Permanente Nacional a través de una providencia lo destituyo del cargo todo lo demás de la auditoria va a seguir los canales institucionales internos y nuestras instituciones internas nos podrán decir cuál es el siguiente paso”, apuntó.
Rechazó además esta auditoría haya sido en represalia por la denuncia que Adolfo Beltrán presentó contra el gobierno de Jesús Estrada Ferreiro ante la ASE toda vez que dijo que ni él ni el presidente del partido tienen el gusto de conocer personalmente al alcalde de Culiacán, saben de su existencia por es el alcalde y tampoco tienen amigos en común.
Dijo que será la Comisión Organizadora del proceso que encabeza la diputada Roxana Rubio la que validara o no el registro de Adolfo Beltrán Corrales este jueves cuando la comisión sesione y del resto de los aspirantes de la dirigencias municipales porque se tienen que revisar que cumplan con todos los requisitos.
Sebastián Zamudio Guzmán y Loar López dieron un recorrido a los reporteros por las instalaciones del partido para revisar los baños y lámparas que fueron remodeladas durante la gestión de Adolfo Beltrán como tesorero y donde se invirtieron miles de pesos, pero que sin embargo físicamente no corresponden a lo invertido.