La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció una serie de programas sociales enfocados en la juventud mexicana que se implementarán a partir de 2026, con el objetivo de prevenir la deserción escolar, fortalecer el tejido social y brindar oportunidades de desarrollo en comunidades vulnerables. Las iniciativas estarán centradas en el acceso a becas, actividades deportivas y culturales, además de acompañamiento psicológico para atender problemáticas derivadas de la desigualdad y la violencia.
El programa “Jóvenes Unen al Barrio” atenderá a jóvenes que viven en zonas con altos índices de violencia o exclusión, ofreciendo becas y acompañamiento personalizado mediante brigadas comunitarias que recorrerán los barrios para identificar posibles beneficiarios. En su primera etapa, se prevé integrar a 20 mil participantes, quienes formarán parte de actividades culturales, deportivas y comunitarias diseñadas para alejarlos de entornos delictivos y fortalecer su sentido de pertenencia.
Otra de las iniciativas es la creación de 100 Centros Comunitarios de Alto Rendimiento, bajo el lema “México Imparable”, los cuales estarán ubicados en municipios con mayor rezago social. Estos espacios ofrecerán entrenamiento y actividades deportivas durante jornadas de cuatro a cinco horas diarias, con el propósito de fomentar la disciplina, promover hábitos saludables y detectar talentos que puedan desarrollarse profesionalmente. Algunos de estos centros también servirán como plataforma para impulsar carreras deportivas.
Asimismo, Sheinbaum anunció la expansión nacional del modelo PILARES (Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes), que demostró éxito durante su gestión en la Ciudad de México. Estos espacios ofrecen alfabetización, capacitación laboral, talleres artísticos y actividades recreativas. El gobierno federal busca replicar esta red en distintas entidades federativas, en colaboración con los gobiernos locales; Yucatán y Colima serán los primeros estados en implementar el modelo.
Finalmente, las nuevas políticas incorporarán un componente de atención emocional y prevención social, enfocado en la salud mental de los jóvenes, el manejo del uso excesivo de redes sociales y el fortalecimiento de vínculos familiares. La presidenta destacó que estas acciones forman parte de una estrategia integral de prevención social, orientada a ofrecer oportunidades reales de inclusión educativa, deportiva y laboral, consolidando así una política pública que promueva el bienestar y el desarrollo humano de la juventud mexicana.
