La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que su gobierno no escatimará recursos para apoyar a las personas afectadas por las intensas lluvias que han golpeado a Veracruz, Hidalgo, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí. Durante su conferencia matutina, la mandataria informó que este año se aprobaron 19 mil millones de pesos para atender desastres naturales, de los cuales ya se han ejercido alrededor de 3 mil millones. “Hay suficientes recursos, no se va a escatimar”, subrayó, tras visitar comunidades afectadas en Puebla y Veracruz.
Sheinbaum explicó que, según estimaciones preliminares, alrededor de 100 mil viviendas podrían haber resultado dañadas en los cinco estados. No obstante, precisó que la cifra final se conocerá una vez concluya el censo que realiza la Secretaría de Bienestar. En la misma conferencia, los gobernadores de las entidades afectadas participaron por enlace remoto para agradecer el apoyo del gobierno federal y de la sociedad civil, destacando acciones como la instalación de albergues, centros de acopio y puentes aéreos para atender a las comunidades incomunicadas.
La presidenta también lamentó la pérdida de 64 vidas a causa de las lluvias, al tiempo que aclaró que no había indicadores que anticiparan una precipitación de tal magnitud. Explicó que las autoridades se encontraban vigilando la tormenta tropical Priscila, localizada en el Pacífico, la cual había generado alertas por lluvias intensas, aunque no se esperaba que coincidiera con otros fenómenos meteorológicos. “Aunque se esperaba precipitación fuerte, se presentaron diversos fenómenos de manera simultánea”, señaló.
Ante la sorpresa que causó la intensidad de las lluvias, Sheinbaum solicitó al secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales Ángeles, ofrecer un informe técnico sobre las causas del evento. El almirante confirmó que, si bien el fenómeno era predecible en términos generales, no se podía calcular con exactitud la cantidad de lluvia que caería. “Esto sí es predecible, si es identificable desde que se analiza el contexto meteorológico, sin embargo, identificar la cantidad exacta de lluvia no era sencillo”, explicó.
Morales Ángeles detalló que el 8 de octubre el Centro Meteorológico de la Marina detectó varios sistemas simultáneos: las tormentas tropicales Priscila y Octavio, una zona de baja presión frente a Veracruz y un frente frío descendente desde Texas que se fusionó con un frente cálido, generando una línea de vaguada. Este conjunto de factores, dijo, provocó lluvias extraordinarias en distintas regiones del país.
El funcionario añadió que las autoridades locales en Veracruz emitieron algunas alertas y realizaron llamados a la población para mantenerse alejados de los márgenes de los ríos, lo que permitió reducir el número de víctimas. Sin embargo, reconoció que la magnitud de la lluvia sobrepasó la capacidad de los sistemas de drenaje y los cauces fluviales.
Finalmente, Morales advirtió que la persistencia de las precipitaciones durante el año debilitó los cerros y saturó los mantos freáticos, lo que aumentó el riesgo de deslizamientos e inundaciones. “Estamos en la fase final de la temporada de lluvias y esto intensifica la actividad atmosférica”, dijo. Mientras tanto, el gobierno federal continúa con el despliegue de apoyo humanitario y la coordinación interinstitucional para atender a las comunidades afectadas en las cinco entidades.
