Con la bandera a media asta en el Zócalo capitalino, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó este viernes la ceremonia en honor a las víctimas de los sismos de 1985 y 2017, los más devastadores en la historia reciente de México.
Acompañada por autoridades federales, estatales, militares y de protección civil, Sheinbaum envió un mensaje de solidaridad: “Nuestro cariño y abrazo a todos aquellos que perdieron un familiar en los sismos del 85 y del 17”.
Más tarde, a las 12:00 horas, se llevará a cabo el Macrosimulacro Nacional 2025, en el que por primera vez se emitirá una alerta sísmica a más de 80 millones de celulares. El ejercicio simulará un terremoto de magnitud 8.1 con epicentro en Michoacán, mientras que en otras entidades se recrearán fenómenos como huracanes, tsunamis o incendios urbanos.
Los mexicanos recuerdan esta fecha con respeto y sensibilidad, pues la coincidencia de ambos sismos (1985 y 2017) ha marcado la memoria colectiva del país.
El sismo de 1985, de magnitud 8.1, dejó más de 3 mil muertes registradas oficialmente, aunque especialistas estiman más de 20 mil.
En 2017, un nuevo terremoto con epicentro en Puebla y Morelos provocó la muerte de 370 personas y más de 7 mil heridos, la mayoría en Ciudad de México.
Tras la tragedia, el Gobierno mexicano destinó más de 33 mil millones de pesos a la reconstrucción de viviendas, escuelas, hospitales y espacios culturales en 10 estados del país.
La memoria, la prevención y la unidad siguen siendo las claves de este 19 de septiembre, un día que México nunca olvida.
