El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó al Departamento de Transporte (TxDOT) eliminar cualquier mensaje político o ideológico de calles y carreteras del estado, lo que incluye los cruces peatonales con los colores del arcoíris en apoyo a la comunidad LGBTQ+. La medida establece que quedarán prohibidas todas las marcas o señales no estandarizadas que no estén relacionadas directamente con el control del tráfico o la seguridad vial, abarcando símbolos, banderas o frases con contenido social o político.
En Laredo, las autoridades locales deberán evaluar un mensaje pintado en la calle Victoria con la leyenda “Defund the Wall”, el cual podría ser removido en cumplimiento de la nueva orden estatal. El alcalde, Dr. Víctor Treviño, señaló que el municipio acatará la disposición del gobernador y consideró que el objetivo principal es mantener la seguridad pública, más que censurar a algún grupo específico. “Tenemos que pensar en la seguridad pública y pienso que esta orden está enfocada en esto”, declaró.
Treviño añadió que si bien es fundamental respetar la libertad de expresión, las autoridades deben mantener un equilibrio entre ese derecho y el cumplimiento de las regulaciones viales. “No se debe restringir la habilidad de tener opiniones públicas, pero esta orden no está enfocada en un grupo particular”, aseguró el alcalde, quien descartó que la medida afecte significativamente a la comunidad LGBTQ+ u otras organizaciones sociales.
Sin embargo, la Gateway City Pride Association manifestó su rechazo a la medida, calificándola como una acción política que busca silenciar las voces defensoras de los derechos humanos. El grupo advierte que la orden representa un retroceso en materia de inclusión y diversidad. Según el mandato estatal, las ciudades que no cumplan con la disposición enfrentarán sanciones severas, como la retención de fondos estatales y federales para infraestructura vial y la suspensión de acuerdos con el TxDOT.





















