Luis Enrique Ramírez Ramos, director del portal de noticias Fuentes Fidedignas y columnista del periódico El Debate de Culiacán fue encontrado asesinado envuelto en plástico negro y emplayado la mañana de hoy jueves a la orilla del camino de terracería que conduce a la colonia Antorchista y al campestre Las Nanchis al sur de Culiacán, confirmó en sus redes sociales, la Fiscal General de Sinaloa, Sara Bruna Quiñonez.
El comunicador de 59 años de edad, fue privado de la libertad durante el transcurso de la noche del miércoles en la colonia Los Pinos.
Autoridades informaron que cuerpo del periodista estaba tirado boca abajo frente a una yarda de trailers, y de unos negocios ubicados a tan sólo unos cuantos metros al poniente de la carretera Internacional México 15 y de los yonques ubicados en el sector.
Fueron los mismos trabajadores de la zona quienes se percataron de la presencia del bulto y dieron aviso a la policía, quienes indicaron que el periodista fue arrojado en el lugar aproximadamente a las 10:00 horas de este jueves, y al momento del hallazgo las autoridades no lograron identificarlo, por lo que lo llevaron al anfiteatro del Servicio Médico Forense.
Fue hasta minutos después que familiares del comunicador acudieron al Semefo e identificaron oficialmente a Luis Enrique Ramírez Ramos, quien tenía poco más de 40 años como periodista y actualmente estaba como columnista en El Debate, por alrededor de 10 años fungió como director del portal Fuentes Fidedignas.
Autoridades se encuentran investigando el trabajo del comunicador, ya que Ramírez Ramos presuntamente recibió amenazas de muerte hace años, al parecer relacionadas con su trabajo, motivo por el que tuvo que dejar el estado de Sinaloa por un tiempo.
La fiscal general de Sinaloa, Sara Bruna Quiñonez, explicó en rueda de prensa que el columnista recibió golpes contusos en su cabeza, fue envuelto en plástico negro y además emplayado, por lo que aseguró que laboran en las indagatorias a fin de esclarecer el homicidio.
En redes sociales hay diversas reacciones lamentando el violento hecho y exigiendo el esclarecimiento.