Culiacán, Sinaloa.- En el caso del tiburonario de Mazatlán, la Fiscalía General del Estado orientó su investigación a los procesos de contratación de la obra y no al colapso de la pecera que fue donde la Auditoria Superior del Estado determino daños al erario público, afirmó la auditora Emma Guadalupe Félix.
Esto trajo como resultado la liberación por parte de un juez del ex director de Control Administrativo del gobierno anterior Dionisio Sánchez.
Félix Rivera explicó que la ASE cuenta con pliegos de responsabilidades por defectos en la obra previó y después al rompimiento del acrílico por cuestiones de incumplimiento de los constructores, en las cuales se tiene determinado daños y perjuicios.
Félix Rivera afirmó que los resultados que se están teniendo con la libración de uno de los implicados van directamente relacionados por la orientación que fiscalía dio y que no tiene que ver con los resultados obtenidos de la auditoria en cuento a la determinación de daños.
“Nosotros le solicitamos a fiscalía que si había alguna conducta que pudiera determinarse como ilícita en materia penal que se abocara pero de ninguna manera en este tema se pidió ¿Por qué?, porque la auditoria no determino daños. Nosotros donde tenemos pliegos y donde tenemos presunto daños que deben ser resarcidos, de no acreditarse, porque no se acredito su debido ejercicio ahí si eso si son nuestros asuntos y si derivado de eso hubiese o inicia pero por donde oriento es lo que está sucediendo en estos momentos”.
Derivado de la auditoría realizada por la ASE a la obra del triburonario se desprendieron tres pliegos de responsabilidades, en los cuales se acredito que hubo daño al erario público, por lo que la auditoria presento las denuncias correspondientes.
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