El gobierno de México solicitó apoyo al Copernicus Emergency Management Service (Copernicus EMS), el sistema europeo de monitoreo de emergencias, para elaborar mapas satelitales que permitan evaluar el impacto de las lluvias e inundaciones registradas el fin de semana en distintas regiones del país. Las precipitaciones han dejado al menos 64 muertos y decenas de desaparecidos, además de graves daños materiales.
La activación del sistema europeo se realizó la noche del 13 de octubre, informó Copernicus EMS a través de la red social X. La Delegación de la Unión Europea en México confirmó la colaboración y explicó que el servicio de mapeo producirá imágenes que muestren la extensión de las zonas inundadas tras las lluvias del 11 de octubre. La activación oficial del servicio, identificada como EMSR845, fue registrada a las 22:53 UTC, de acuerdo con el reporte publicado por la institución.
El Rapid Mapping Service de Copernicus analizará imágenes satelitales para determinar la magnitud de los daños en cinco zonas prioritarias: Álamo, Cazones de Herrera, Poza Rica, Tuxpan y Nuevo Necaxa, ubicadas en el norte de Veracruz y en áreas colindantes de Puebla e Hidalgo. Estas regiones fueron severamente afectadas por los desbordamientos de ríos, los deslaves y la pérdida de viviendas.
De acuerdo con la Coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, las lluvias torrenciales han causado 64 muertes y 65 desapariciones, además de miles de viviendas destruidas o cubiertas por lodo y escombros. Las autoridades continúan con labores de rescate, limpieza y asistencia a damnificados, mientras los mapas satelitales permitirán precisar la magnitud total del desastre y planear la ayuda humanitaria.
El Copernicus EMS, parte del programa espacial europeo Copernicus, es coordinado por el Centro de Coordinación de Respuesta a Emergencias (ERCC) de la Comisión Europea. Sus mapas y reportes estarán disponibles públicamente y de forma gratuita en su portal oficial (https://emergency.copernicus.eu/mapping), con el objetivo de facilitar la cooperación internacional y acelerar la recuperación de las comunidades afectadas.






















