Las altas temperaturas, las primeras lluvias de la temporada y la cercanía de las vacaciones escolares están afectando significativamente a los vendedores ambulantes del centro de Culiacán, quienes ya reportan una caída del 40 por ciento en sus ventas, informó Laura Alicia Quevedo, dirigente del Bloque de Vendedores Ambulantes del Centro.
Aunque las lluvias apenas comienzan, es el calor extremo lo que más ha golpeado al comercio informal.
“Está muy fuerte el calor, los compañeros se hidratan con agua y suero, pero muchos ya piensan en retirarse por cuestiones de salud”, expresó.
Quevedo explicó que varios de los comerciantes ambulantes padecen enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes e incluso cáncer, lo que complica aún más su permanencia en la vía pública durante las largas jornadas, especialmente en los meses más calurosos como julio y agosto.
A este panorama se suma la próxima temporada vacacional, que reduce considerablemente la afluencia de personas en el centro de la ciudad.
“Mientras hay clases hay algo de movimiento, pero ya la próxima semana esperamos una baja mayor en las ventas”, comentó.
La dirigente también señaló que la inseguridad es otro factor que ha impactado negativamente la actividad comercial, sumando así cuatro elementos críticos: calor, lluvias, vacaciones e inseguridad.
A pesar de estas adversidades, aseguró que los comerciantes seguirán trabajando en sus horarios habituales, de 9:00 de la mañana a 7:00 de la tarde.
“Llueva, truene o relampaguee, nosotros vamos a seguir ahí”.
Finalmente, los vendedores ambulantes hicieron un llamado a la ciudadanía para que consuma local y apoye al comercio informal, que enfrenta condiciones climáticas y sociales adversas para poder subsistir.
